Una de las inquietudes al inicio de la pandemia fue que los animales pudieran también contraer y contagiar el coronavirus. La escasez de pruebas PCR, que en muchas casos ni siquiera estuvieron disponibles para las personas, mantuvo la incógnita varios meses aunque algunos estudios realizados -sobre todo con gatos de China-, los casos positivos detectados en tigres y leones en el zoo de Nueva York, así como algunas necropsias realizadas a animales fallecidos en centros veterinarios permitieron determinar que los felinos también se infectaban y, en menor medida, los perros.
No se ha demostrado sin embargo que ni los gatos ni los perros transmitan el coronavirus a las personas (los casos registrados se produjeron por contagios de animal a animal), algo que sí ha ocurrido con los visones, la especie más preocupante para controlar la epidemia y la única en la que, al menos de momento. se ha descubierto que el virus se puede contagiar en dos direcciones: de persona a animal y a animal de persona.
Un nuevo estudio confirma esas conclusiones preliminares tras analizar la susceptibilidad al SARS-CoV-2 de 10 especies animales con métodos computacionales. Los hurones, los gatos y las civetas (unos mamíferos carnívoros de pequeño tamaño) son los animales más susceptibles a la infección por coronavirus después de los humanos, según esta investigación liderada por investigadores del Centro de Regulación Genómica (CRG) en Barcelona y publicada en la revista Plos Computational Biology.
Por otro lado, los patos, las ratas, los ratones, los cerdos y los pollos tienen una susceptibilidad menor o nula a la infección en comparación con las personas, que son las más proclives a la infección. «Los virus se especializan en infectar a ciertas especies, y el SARS-CoV-2 está muy adaptado a la maquinaria humana», afirma en conversación telefónica Luis Serrano, director del CRG y autor principal del estudio.
De las 10 especies estudiadas, en cinco de ellas (humanos, gatos, hurones, civetas y perros) se han documentado infecciones por SARS-CoV-2 a través de experimentos o análisis. En ratones, ratas, cerdos, pollos y patos no se han detectado casos. «Nos hemos centrado en animales que suelen convivir con el hombre aunque conociendo el genoma de cualquier especie y la secuencia del virus podemos determinar si se va a infectar», dice el investigador.
«En algunas de estas especies domésticas se habían detectado infecciones y en otras no, y queríamos comprobar si computacionalmente obteníamos el mismo resultado que en los experimentos», señala. «Se podría pensar que todas las especies de mamíferos tienen una probabilidad de infectarse parecida pero no es así, por ejemplo, parece que el cerdo no se infecta», añade.