Por Geovanna Bañuelos
Por los efectos de la pandemia del covid y la irrupción de conflictos armados en varias regiones del mundo, se ha modificado el entorno geopolítico provocando severos efectos en la economía global generando la fractura de las cadenas de producción. En México, no ha sido la excepción. En este contexto, el papel que ha jugado el Estado mexicano ha sido trascendental para generar políticas que estabilicen la economía. Durante los últimos cincoaños se ha observado una importante apreciación de nuestra moneda. En 2018 el tipo de cambio era de 20.3 pesos por dólar, mientras que a finales del 2023 ha alcanzado hasta 16.98 por unidad. De igual forma, en 2018, el 41.9% de la población vivía en condiciones de pobreza, para el año 2022 se ha logrado reducir al 36.3%.
El salario mínimo tiene un crecimiento histórico. En 2018 era de 88.15 pesos, para el próximo año incrementará a 248.93 pesos diarios. De esta manera, un trabajador recibía al mes 2 mil 644 pesos al mes, en 2024 percibirá 7 mil 467 pesos mensuales. Cabe señalar la importancia del apoyo a la economía social y el importante papel de los programas de bienestar han brindado a la población más vulnerable el acceso a una vida más digna.
Nuestra economía no solo se encuentra estable, sino que presenta un fuerte impulso en sucrecimiento. En México, este 2023 se han creado 173 mil 257 empleos formales en octubre de 2023, hasta superar los 22.3 millones de trabajadores registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), marcando un nuevo récord por segundo mes consecutivo este año. De esta manera, la economía mexicana suma 929 mil 794 plazas creadas en los 10 primeros meses de este año, con un incremento interanual acumulado de 3.2%. De acuerdo con las estimaciones realizadas por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, en la región Centroamérica, México ha crecido 3.5% y para 2024 se estima crezca al menos 2.7%.
En este balance, se debe reconocer que restablecer la paz en el país es una asignatura pendiente. La inseguridad erosiona el tejido social con implicaciones directas a la sociedad, la política y la economía, sin embargo, se debe reconocer que se han reducido los delitos de alto impacto: 21.8% los homicidios dolosos, 79.5% menos el delito de secuestro y un 43.8% menos robos de vehículos si comparamos el año 2018 con el 2023.
2024 podrá ser el año donde los mexicanos tendrán que elegir entre la continuidad de la transformación de la República o un proyecto antagónico y opuesto a las legítimas necesidades y anhelos del pueblo.
