Durante los meses de junio y julio de 2019, la Secretaría de Gobernación y el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas convocaron a un extenso diálogo con las comunidades indígenas para desarrollar la Reforma Indígena, la cual busca reconocer a los pueblos indígenas y afromexicanos como sujetos de derechos plenos, destacó Ulises Mejía Haro, diputado federal por Zacatecas, en una reciente entrevista.
Mejía Haro precisó que esta iniciativa que se abordará esta semana en el Congreso de la Unión, fue presentada el 5 de febrero de 2024 y propone modificaciones al artículo 2 constitucional, en donde las consideraciones clave de la Reforma al son:
•Elevar el estatus de los pueblos y comunidades indígenas a sujetos de derecho público, en lugar de simples entidades de interés público.
•Garantizar asistencia a las personas indígenas con intérpretes, traductores y defensores especializados en derechos indígenas, pluralismo jurídico, perspectiva de género y diversidad cultural.
•Establecer el derecho de consulta previa para proteger los derechos y bienes indígenas, asegurando su participación en decisiones legislativas y administrativas que les afecten.
•Promover, usar y difundir las lenguas y cultura indígenas, integrándolas en medios de comunicación, telecomunicaciones y tecnologías de la información.
•Fortalecer el sistema nacional de salud pública integrando la medicina tradicional indígena con un enfoque intercultural.
•Ampliar la infraestructura de comunicaciones y el acceso a tecnologías como internet y telecomunicaciones en comunidades indígenas.
•Reconocimiento del Trabajo Comunitario como una parte integral de la organización social y cultural indígena.
•Implementar políticas y recursos para asegurar el bienestar y la protección de niñas, niños, adolescentes y jóvenes indígenas y afromexicanos, con enfoque en la prevención de violencia y adicciones.
• Reconocimiento de Pueblos Afromexicanos; se busca en los registros oficiales y asegurar que disfruten de derechos equivalentes a los de las comunidades indígenas.
Ulises Mejía Haro concluyó que la reforma tiene como objetivo integrar y proteger de manera más efectiva a los pueblos indígenas y afromexicanos en el marco legal y cultural del país, garantizando un mayor respeto y cumplimiento de sus derechos fundamentales.