Por Geovanna Bañuelos
Diez argumentos que demuestran la necesidad de contar con el Ejército y la Marina en tareas de seguridad pública los próximos seis años.
- En el año 2018 el Presidente Andrés Manuel López Obrador recibió un país teñido de sangre, como resultado de la incapacidad e incompetencia de gobiernos que no atendieron adecuadamente la seguridad del país.
- Al inicio de este sexenio los órganos civiles de seguridad en el ámbito federal, como lo era la Policía Federal; y las policías estatales y municipales, se encontraban –se encuentran- corrompidos, coludidos o amedrentados por los grupos criminales.
- El caso más emblemático y referente de la corrupción es el del exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, durante el sexenio de Felipe Calderón, hoy preso en Estados Unidos por narcotráfico.
- El gobierno de la Cuarta Transformación ha iniciado el proceso para acabar con la espiral de violencia que afecta al país, a través de la reconstrucción de las instituciones, la creación de un cuerpo de seguridad disciplinado como lo es la Guardia Nacional.
- La violencia criminal creció en las últimas décadas al abrigo de la descomposición, abandono e indiferencia de las autoridades, aunado a la expansión de las redes criminales a través del gradual deterioro del tejido social, por lo que se requiere más tiempo para alcanzar la paz social.
- La crueldad y el salvajismo del crimen organizado que parece no tener límites, no puede enfrentarse con la fuerza civil que tenemos actualmente. Como referente, 26 gobernadores, sin importar su ideología u origen partidista, han solicitado el apoyo del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional.
- Para garantizar que las familias mexicanas vivan en paz, es necesario aprovechar las cualidades de las Fuerzas Armadas y seguir avanzando en el crecimiento, implantación territorial y consolidación de la Guardia Nacional.
- La actuación de la Guardia Nacional debe ser en todo momento regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria. Es fundamental establecer los mecanismos para que los representantes populares, supervisemos la actuación del Ejército y la Marina en tareas de seguridad pública.
- El pueblo de México ha confiado en las Fuerzas Armadas. A lo largo de la historia han apoyado a la población en los momentos de mayor necesidad y zozobra. La construcción de la paz es la principal demanda ciudadana.
- México anhela armonía, bienestar y tranquilidad, fracturada desde hace más de una década. Las Fuerzas Armadas permanente al servicio del pueblo es la respuesta para poner fin a esta larga agonía de luto y dolor.