Para dar cabal cumplimiento a la encomienda del Gobernador David Monreal Ávila de que todas las dependencias que integran esta administración tengan contacto directo con la ciudadanía y difundan información que pueda prevenir enfermedades, autoridades de la Secretaría de Salud (SSZ) advierten sobre el uso de suplementos alimenticios que pueden dañar el organismo de las personas.
William González Serrano, jefe del departamento de Verificación Sanitaria de Productos y Servicios de la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios de la SSZ, informó que un suplemento es aquel producto a base de hierbas, extractos vegetales, alimentos tradicionales, deshidratados o concentrados de frutas, adicionados o no, de vitaminas o minerales, que se puedan presentar en forma farmacéutica y cuya finalidad de uso sea incrementar la ingesta dietética total, complementarla o suplir algún componente, de acuerdo al artículo 215 de la Ley General de Salud.
Declaró que la única función de éstos es incrementar, complementar o suplir alguno de los componentes que se adquieren a través de la dieta diaria, pues algunas personas no obtienen en su alimentación todos los nutrimentos que necesitan y, por ello, recurren a los suplementos para complementar su alimentación.
Aclaró que no son productos dirigidos para tratar, curar, prevenir o aliviar síntomas de alguna enfermedad; de igual manera, no sirven para bajar de peso, combatir la obesidad o sobrepeso. Por lo que hizo un llamado a la población para que evite el consumo de estos productos sin la recomendación de un médico o nutriólogo que evalúe previamente su estado general de salud.
Para que un producto de este tipo esté permitido por las autoridades sanitarias es indispensable que sigan algunas reglas como: mostrar la frase suplemento alimenticio en su empaque, una breve descripción del producto, la lista clara de ingredientes y sus cantidades, así como el nombre y dirección del fabricante o importador, envasador, maquilador y distribuidor nacional o extranjero.
De igual manera, deben mostrar la fecha de caducidad y la frase: “este producto no es un medicamento y su consumo es responsabilidad de quien lo recomienda y de quien lo usa”, en letra mayúscula y de manera destacada.
Mencionó que los productos que dicen ser suplementos alimenticios, pero al mismo tiempo anuncian que sirven para tratar o curar una enfermedad, síntomas o padecimientos, a través de su publicidad o de vendedores o promotores, no son suplementos alimenticos y engañan al consumidor.
Recordó que las frases que se utilizan en empaques como: “producto 100% natural”, “de origen natural”, entre otras, no significan que el producto no provocará ningún efecto secundario, pues existen un gran número de ingredientes de origen vegetal que pueden resultar tóxicos.
En caso de observar un producto que se encuentre a la venta y no cumpla con los requisitos mencionados, se pueden denunciar de manera confidencial al teléfono 4929239494 en la extensión 52221.