En el marco de la 5ta Semana Nacional de las Ciencias Sociales, que organiza el Consejo Mexicano de Ciencias Sociales (COMECSO), la Unidad Académica de Ciencias Políticas, que encabeza como director Héctor de la Fuente Limón, organizó el panel “Violencia en Zacatecas: experiencias de resistencia y denuncia frente a una academia silenciosa”.
Con un enfoque crítico, franco y valiente, participaron en el foro universitario realizado en el auditorio de Piscología: dos mujeres que sufrieron la desaparición forzada de algunos de sus seres queridos: Guillermina Camacho Serna y Elvia Margarita Reyes Rodríguez, integrantes ambas del colectivo “Zacatecanas y Zacatecanos por la paz”.
También intervinieron los periodistas Adolfo Vladimir Valtierra, fotoreportero de la agencia nacional CUARTOSCURO, así como Irma Mejía, corresponsal del periódico El Universal de la Ciudad de México.
Además, los docentes – investigadores de la unidad académica de Ciencias Políticas, Malely Linares y Jairo López, quienes presentaron un análisis general sobre la situación de violencia e inseguridad que padece la población de Zacatecas, con reveladoras cifras incluidas.
Entre ellas, mencionaron los investigadores –en un texto redactado en equipo, y leído ante decenas de maestros y estudiantes universitarios-, el estado de Zacatecas tuvo un crecimiento constante de homicidios dolosos, particularmente en el último lustro, pasando de 286 en el 2015 a 1 mil 065 en el 2020, y para el año 2021, la cifra se incrementó a 1 mil 167 casos.
Asimismo, en su análisis introductorio al tema, los investigadores Malely Linares y Jairo López, advirtieron que, de acuerdo con su investigación, en el año 2021 el estado de Zacatecas tuvo una tasa de 58.4 homicidios por cada 100 mil habitantes, superando la media nacional que fue de 37, por cada 100 mil personas.
Respecto al grave problema de la desaparición forzada de personas, este delito se incrementó –de acuerdo con las cifras oficiales, que no por ser oficiales significa que sean verdad, aclaró Jairo López-, se pasó de 154 casos en el año 2017, a 334 en el 2020 y 521 en el 2021, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional de Búsqueda.
Jairo López lamentó además el hecho de que, ante la grave problemática de violencia e inseguridad que se vive en la entidad, “cuando buscamos estudios o informes especializados de la academia zacatecana, sobre el contexto actual de violencia, nos quedamos con las manos vacías”.
“Buscamos en internet eventos de los últimos dos años de pandemia que abordaran el análisis del contexto de violencia en Zacatecas y, salvo un taller de coyuntura que realizamos a inicios de año, nos quedamos nuevamente con las manos vacías. Cuando observamos la timidez con la que la propia universidad al asesinato de sus propios estudiantes, no pudimos dejar de consternarnos”.
Peor aún fue la postura del gobernador del estado, -señaló el docente universitario-, a propósito de la determinación que tomó el rector Rubén Ibarra Reyes, de suspender las clases en la UAZ, el lunes 29 de agosto, luego de que el fin de semana previo, hubo una fuerte ola de violencia e inseguridad, que incluyó el bloqueo de carreteras en varios municipios con autobuses y trailers quemados:
“Cuando vimos que al gobierno estatal le molestó que la universidad hiciera una pausa, para proteger a su población estudiantil y trabajadora, nos indignamos”.
Sobre el problema grave del incremento de personas desaparecidas en Zacatecas, la investigadora Malely Linares señaló que entre los años 2016 y 2021 dijo, se concentran más del 70 por ciento de las desapariciones reportadas históricamente en el estado (cerca de tres mil), presentándose el mayor número de casos, en los municipios de Fresnillo, Zacatecas, Guadalupe, Río Grande, Jerez, Villa de Cos, Valparaíso, Calera, Ojocaliente y Sombrerete.
Además, entre el año 2021 y 2022 “se han presentado más de 9 episodios de desplazamiento forzado colectivo, en las comunidades rurales de Sarabia, Palmas Altas, Ermita de los Correas, y otras 16 comunidades de la sierra del municipio de Jerez, se estiman que son aproximadamente 2 mil 500 personas desplazadas”.
En otro momento del evento académico, las madres Guillermina Camacho Serna y Elvia Margarita Reyes Rodríguez narraron la difícil y amarga experiencia que ha representado para ellas y sus familias, el emprender la búsqueda de sus hijos, desgastante, frente a pasividad de los agentes del ministerio público y la Fiscalía del estado, que son las autoridades responsables de investigar, pero no lo hacen.
También los periodistas Irma Mejía y Adolfo Vladimir Valtierra expusieron una perspectiva como periodistas que no solo arriesgan su vida cotidianamente, al dar cobertura a los hechos de violencia e inseguridad que se producen cotidianamente en Zacatecas, sino que, al igual que las víctimas de los delitos, se enfrentan a un vacío de información y extraña pasividad para resolver los casos, llegando a la conclusión de que “el poder ilegal, está coludido con el poder legal”, remató la corresponsal de El Universal.