Este viernes santo, luego de dos años de haber sido interrumpida debido a la pandemia actual, miles de turistas y zacatecanos volvieron a ocupar las calles de la capital del estado para presenciar la Procesión del Silencio, una tradición que se ha convertido, además, en una manifestación cultural que muestra la riqueza del estado.
Aunque con menor número de participantes y cofradías (en esta ocasión fueron 2 mil personas en lugar de las 6 mil que en años anteriores tomaron parte de esta procesión), así como un recorrido más corto, para cuidar los protocolos sanitarios que prevalecen en Zacatecas debido al COVID-19, los asistentes se apropiaron de las calles Guerrero, Allende e Hidalgo para presenciar el tránsito de las imágenes de María y Jesús, cargando la cruz, así como de las más representativas de los templos de la ciudad.
Esta manifestación, en la cual las y los cófrades marchan en silencio y con monotonía, al ritmo de los tambores de las bandas de guerra que los acompañan, fue observada por zacatecanos y visitantes que acudieron al Festival Cultural Zacatecas 2022, al que la Procesión se ha integrado a lo largo de los años.
Es importante destacar que, solamente para esta ocasión, las distintas imágenes que representan la pasión de Cristo y datan del Siglo XVI –entre ellas la del Santo Entierro, que se encuentra en el templo de San Juan de Dios- son sacadas de las parroquias que las albergan, lo cual permite a las familias de locales y visitantes apreciar este tipo de arte sacro que forma parte del acervo histórico y cultural del estado.
La Procesión del Silencio –en la que participan las parroquias y templos que integran la Diócesis de Zacatecas- fue traída por los españoles y tiene casi 500 años realizándose de manera espectacular. En la entidad, las procesiones del Silencio fueron declaradas como Patrimonio Cultural Inmaterial, en marzo de 2015. Se estima que, normalmente, participaban, aproximadamente, 30 mil personas.
Este año, la Procesión del Silencio completó su recorrido en el ambiente de solemnidad y respeto que la caracteriza, así como con el orden que ha distinguido a quienes asistieron a las distintas actividades que conformaron el Festival Cultural Zacatecas 2022, durante esta semana.
